¿Crees que tienes una buena idea para implementar un negocio en internet? Ese, sin duda, es un buen comienzo, pero no es el punto de partida. Me explico: sé de muchas ideas, muy buenas ideas, que nunca llegaron a convertirse en negocios, dentro o fuera de internet, simplemente porque no pudieron sortear la primera prueba. ¿Cuál? El estudio de mercadeo previo a la implementación. ¡Ese es el primer paso!
A veces ocurre que los emprendedores se dejan llevar por la emoción de la proximidad de la fecha para abrir su negocio, para subir su página web y comenzar a trabajar para cristalizar sus sueños. ¡Es algo natural, así somos los seres humanos! Sin embargo, como lo he dicho en oportunidades anteriores, hay que tener cuidado porque del afán solo queda el cansancio: si omites algo importante, después puedes pagarlo caro.
Y sé, por la experiencia de muchos años en el medio de los negocios, que el aspecto que más se olvida, el que más veces se pasa por alto, es justamente el más importante: la investigación de mercado. Esto implica conocer exactamente qué empresas ya están y cuáles de ellas ofrecen lo mismo que nosotros tenemos pensado ofrecer. El objetivo es darnos cuenta de a qué tipo de competencia nos vamos a enfrentar, cómo es el escenario en el que vamos a jugar.
Es cierto que tu idea puede ser muy buena, pero también es posible que ese producto o ese servicio ya esté en el mercado, que sean no una, sino varias las empresas que lo ofrecen. ¿Cómo saberlo? Hay una estrategia realmente sencilla y efectiva: acudir a la Cámara de Comercio de tu ciudad, que es donde están registradas todas las empresas legales, y pedir el registro de las que están en el nicho al que pretendes atacar.
Una vez que tengas el listado, lo que sigue es elaborar una elemental tabla de Excel con el nombre de la empresa, la url de la compañía, el objetivo (a qué se dedica) y otra casilla con observaciones: características por las que puedes diferenciarte de ella. Si deseas, puedes realizar una acción complementaria, que también es útil: investiga en internet acerca de esas empresas, mira sus páginas web, intenta construir un completo perfil.
La mejor forma de enfrentar la competencia, especialmente cuando uno es el nuevo en el mercado, es conseguir un posicionamiento de diferenciación en relación con las ofertas que ya el público conoce. El resultado de esa investigación previa debe ser, precisamente, determinar con exactitud, léelo bien, con exactitud, las características de cada uno de los actores, es decir, a qué se dedican, cuáles son sus fortalezas y, obvio, sus debilidades.
Cuando hayas construido ese esqueleto que te permita conocer el mercado ahí sí, solo entonces sí, podrás diseñar tu propuesta de valor. Es natural que poseas algunas características similares a las de otros productos existentes (es completamente imposible ser absolutamente distinto, nuevo), pero tendrás que enfocarte en lo que los demás no ofrecen o en lo que no satisfacen la demanda del mercado y el gusto de los clientes.
Otro resultado interesante de una buena investigación de mercado previa es la posibilidad de entablar alianzas estratégicas. Eso, lo sabes, es algo útil para quienes están comenzado y quizás no cuentan con los recursos necesarios para arrancar al ciento por ciento, y de paso te da la posibilidad de paliar cualquier eventual debilidad que pueda tener tu propuesta. La clave, por supuesto, es aliarte con alguien que distinto (aunque parecido) al tuyo, para complementarse y enriquecerse mutuamente.
Y un último beneficio, nada despreciable: una buena investigación de mercado te permite quedar con la inteligencia de marketing (información del mercado) que es muy valiosa para diseñar tus estrategias, para acertar en la forma en que te diriges al público y garantizar que te diriges al público correcto. Date cuenta de la cantidad de información, especialmente del valor de la información, que se desprende de la investigación.
Si crees que tienes una buena idea para iniciar un prometedor negocio en internet (o fuera de él), te felicito. Ese es un buen comienzo, lo repito, pero el primer paso, el que puede marcar la diferencia entre el éxito y el fracaso, entre la permanencia o la desaparición de tu negocio, es la investigación de mercado. ¡Ese es el primer paso! Y recuerda: para llegar al final del mundo no es necesario correr, solo debes dar el primero paso, y después otro, y otro… Hasta pronto.