Un tipo común y corriente, como cualquiera que uno puede cruzarse desprevenidamente en la calle y pasar de largo sin prestarle atención. No encaja en el perfil del millonario precoz o del líder de una de las empresas de moda. Un tipo común y corriente que puede ser el responsable de grandes transformaciones por las que el mundo sea distinto en el futuro.
Nacido el 22 de abril de 1985 en Chicago (Illinois), Sam Altman es uno de tantos miembros de la generación de los mileniales. Sí, de aquellos que nacieron justo cuando comenzaba a darse la transformación digital que cambió el mundo, que nos cambió la vida. Por si este nombre no te resulta familiar, es el CEO de OpenAI, al empresa que desarrolló ChatGPT.
Hijo de la dermatóloga Connie Gibstine (no hay registro del padre), en la ciudad de San Luis (Misuri) y tiene un hermano llamado Jack. Muy joven, a los 12 años, descubrió que la tecnología y los computadores serían su vida. A corta edad también fue diagnosticado con el síndrome de Asperger, un trastorno de comportamiento que afecta la capacidad para socializar.
Por eso, justamente, ese primer computador que llegó a su casa se convirtió en su mejor compañía, en su refugio. Criado como judío, estudió la secundaria en John Burroughs School, de orientación cristiana, donde dio uno de los pasos trascendentales de su vida: salió del clóset y se declaró abiertamente gay. Se cansó del acoso de sus compañeros.
“Crecer siendo gay en el Medio Oeste en los años 2000 no era algo precisamente idílico, pero encontrar las salas de chat de AOL me ayudó. Tener secretos a los 11 o 12 años no es nada bueno”, declaró Altman en una entrevista concedida a la prestigiosa revista The New Yorker, en 2016. Una decisión valiente que, contrario a lo esperado, le abrió puertas.
Ingresó a la prestigiosa Universidad de Stanford, en California, a cursar estudios de Informática. Sin embargo, dejó las aulas luego de dos años y se lanzó al agua como empresario. Corría el año de 2005 y contaba apenas 19. Junto con unos compañeros lanzó Loopt, una aplicación para telefonía móvil que reportaba a sus amigos la ubicación.
Una idea revolucionaria que, suele suceder, no cuajó en aquel momento. Vendieron la empresa en 2012 y Altman saltó a Y Combinator, una empresa dedicada a cofinanciar starup, como socio. En febrero de 2014, fue nombrado presidente por el cofundador Paul Graham. Invirtió en proyectos como Loopt, Airbnb, Dropbox, Zenefits y Stripe, entre otros.
El siguiente paso lo puso en boca de todo el mundo. Junto con Elon Musk, creó OpenAI, la compañía que le permitió cumplir el sueño de trabajar con la inteligencia artificial. Esta empresa permaneció oculta para el mundo hasta que a finales de 2022 lanzó ChatGPT, la tecnología que ha revolucionado el mundo de la tecnología y causó un gran revuelo.
Por si no lo sabías, te cuento que ChatGPT se convirtió en la aplicación de consumo de más rápido crecimiento en la historia. Después de lanzamiento alcanzó un estimado de 100 millones de usuarios activos mensuales en tan solo dos meses. En comparación, Tik Tok, otra app exitosa, tardó nueve meses en llegar a este nivel e Instagram, más de dos años.
Como cualquier empresario que subió a la cima y saboreó las mieles del éxito, Altman tiene su fórmula del éxito. Que no es un libreto, que no es un paso a paso, que no es algo estrictamente original. Se trata de un método propio surgido de haber adaptado el modelo de éxito de otros y diseñado uno ajustado a su personalidad. Estas son sus premisas:
1.- Mejora exponencialmente.
“Nunca te estanques, nunca te quedes quieto. Contrata y subcontrata para aumentar su producción”, sugiere Altman. ¿Cómo lograrlo? Hay que pensar en grande, que incluye dejar pasar las pequeñas oportunidades y enfocarse en la grandes, en las que significan un avance importante, un salto cualitativo. Algo crucial: “defina su métrica de éxito”.
2.- Confíe en sí mismo.
“Las personas más exitosas que conozco creen en sí mismas casi hasta el punto de engañarse”, dice Altman. “Perseveran porque están seguras de que están en algo. Sospechan que pueden, y lo hacen”. Advierte, eso sí, que tendrás que lidiar con enemigos, detractores, envidiosos y pesimistas que intentarán hacerte creer que no puedes lograrlo.
3.- Piensa fuera de la caja.
Si haces lo que todos hacen, tus resultados serán los mismos de todos los demás. “Pensar desde los primeros principios y tratar de generar nuevas ideas es divertido, y encontrar personas con las que intercambiarlas es una excelente manera de mejorar en esto”, asegura. Dale rienda suelta a tus ideas locas: el siguiente paso es hacerlas realidad.
Sam Altman, el CEO de OpenAI, es un tipo común y corriente que hace cosas extraordinarias.
En compañía de Elon Musk, dueño de Twitter y Tesla, Sam Altman fundó OpenAI en 2015. La compañía estuvo bajo el radar mediático hasta que el lanzamiento de ChatGPT la puso en boca de todos. Estos son sus 10 (sabios) consejos para lograr el éxito.
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4.- Aprende a vender.
La asignatura pendiente para la mayoría. “Tienes que ser capaz de convencer a otras personas de lo que crees”. La persuasión, la comunicación asertiva y el dominio de las técnicas de neuromarketing te permitirán transmitir un mensaje poderoso. “La mejor manera de ser bueno en ventas es creer genuinamente en lo que vendes”, dijo Altman.
5.- Asume riesgos.
Según el CEO de OpenAI, “una vez tengas cubiertas tus obligaciones básicas, asume riesgos, haz apuestas atrevidas”. La teoría de Altman es que las grandes recompensas son solo para aquellos que son audaces, que rompen paradigmas, que se atreven a hacer las cosas de otra manera. Algo importante: “Haz que tu estilo de vida concuerde con esto”.
6.- Mantente enfocado.
Trabajar mucho no es suficiente, dice. Para conseguir los resultados que deseas, es necesario estar enfocado. “Es mucho más importante trabajar en lo correcto que trabajar muchas horas”, asegura. Y dice que le llama la atención ver tanta gente que dedica mucho tiempo a tareas insignificantes o poco productivas por ir en “piloto automático”.
7.- Trabaja, duro y sostenido.
Coincido totalmente: lo mejor de la vida cuesta. Tiempo, trabajo, dedicación, disciplina y sudor. “Las personas extremas obtienen resultados extremos”, afirma. El éxito es la consecuencia directa de ir un paso más allá, de dar un poco más que el resto. Según Altman, establecer prioridades y trabajar duro y sostenido es la clave del éxito.
8.- Sé audaz.
Seguir tu instinto, hacerle caso a tu mente curiosa y no dejarte llevar por lo que piensan los demás son, según Altman, ingrediente de la fórmula del éxito. “Las cosas que te parecen emocionantes a ti a menudo también les parecerán emocionantes a otras personas”. Si quieres inspirar a otros, sé audaz, demuéstrales que estás convencido.
9.- No te rindas.
“Sé obstinado”, aconseja Altman. “Las personas tienen una enorme capacidad para hacer que las cosas sucedan –asegura–, pero una combinación de dudas, darse por vencidas demasiado pronto y no esforzarse lo suficiente impide que la mayoría alcance su potencial”. Una premisa llamativa: “Nunca conocí a un pesimista que logró el éxito”.
10.- Sé diferente.
Una marca personal sólida, desarrollar diferentes habilidades y no copiar a nadie son, en palabras de Altman, argumentos que les dificultarán a otros la tarea de competir contigo. Haz que su tarea sea difícil, que tengan que exigirse al máximo siempre. Identifica tus fortalezas y poténcialas. Y otro consejo sabio: “construye una red de relaciones sólidas”.
El objetivo inicial de OpenAI con la inteligencia artificial era asegurarse de que la IA no acabara con los humanos. A pesar de las críticas y los temores del mercado, Altman es un defensor a ultranza de la IA generativa y está convencido de los beneficios que le aportará a la humanidad. “Una vez los seres humanos nos adaptemos, las dudas desaparecerán”, dijo.
“Una de las cosas en la que realmente creemos es que la forma más responsable de introducir esos sistemas en la sociedad es gradualmente”, afirmó en una entrevista reciente. “La idea es que las personas, las instituciones y los encargados de las regulaciones se familiaricen con él, sientan la tecnología, en lugar de soltar un sistema superpoderoso de golpe”, agregó.
Analistas de Silicon Valley, que siguen de cerca los pasos de Sam Altman, aseguran que su estrategia consiste en sacar al mercado productos que todavía son imperfectos, que requieren mucho desarrollo, para que poco a poco la sociedad se adapte a ellos. Así, cuando el producto esté listo, para nadie será una novedad y será más fácil de aceptar.
“Trato de hacer las cosas que me interesan en este momento… He tratado de aferrarme a las cosas que realmente amo, que tienden a ser tecnología dura, que involucran años de investigación y desarrollo. Sé que siempre involucra un riesgo, pero si funciona, realmente funciona”, asegura. Y no le cierra las puertas a ningún proyecto que le resulte atractivo.
De momento, a la sombra de su trabajo en OpenAI, Altman impulsa desde hacer años los trabajos de investigación y desarrollo de la empresa Helion Energy. El objetivo es producir energía eléctrica limpia de bajo costo utilizando un combustible derivado exclusivamente del agua. Sostiene que la energía nuclear es una de las áreas fundamentales del desarrollo tecnológico.
Un tipo común y corriente, pero con logros extraordinarios. Es poco o nada lo que se conoce de su vida privada o, increíblemente, de su patrimonio. Lejos está de ser una figura mediática, pero no cabe duda de que en el caso de Sam Altman lo mejor está por venir. No cabe duda, así mismo, de que las próximas generaciones disfrutarán mucho su legado.
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