Un proceso formal y estandarizado de retroalimentación, permite ofrecer productos y servicios que respondan a las necesidades expresadas por los clientes. Vivimos los días del marketing 1 a 1. ¿Qué significa? ¿Cómo se hace? Son respuestas que encontrará aquí.

En la prehistoria, la comunicación con los clientes tenía una sola dirección que partía desde la empresa. Con el correr del tiempo, las empresas comenzaron a tomar en cuenta la opinión de los clientes y surgió la palabra retroalimentación.

Hoy en día, un proceso formal y estandarizado de retroalimentación, permite ofrecer productos y servicios que respondan a las necesidades expresadas por los clientes. Son los días del marketing 1 a 1.

Cuando usted va a una pizzería, tiene un menú para elegir la variante que más le guste, determinada por cientos de consumidores previos a su paso. Eso no quita que usted pueda ordenar los ingredientes que desea. Su pizza será única. Producida por su deseo y para su satisfacción. Un pizzero moderno, recogería la información sobre sus gustos y la próxima vez, al verlo podría decirle «¿lo de siempre?»

Los fabricantes de equipos fotográficos hacen su parte. Una cámara reflex presenta un cuerpo central y de allí en adelante, usted le podrá anexar la lente o accesorios que se le ocurran. Son todos intercambiables.

¿Cómo funciona este proceso en el mundo online ? Los web sites deben requerir y/o capturar información de los visitantes, con la intención de almacenarla en una base de datos, que luego les permita reconocerlos y ofrecerles productos o contenido de acuerdo con sus preferencias individuales.

Miles de visitantes a un mismo sitio y teniendo experiencias personalizadas todos al mismo tiempo ? Si, así es como funciona.

El Marketing uno a uno en Internet se basa en la interrelación entre las personas. Cada persona es tratada en forma individualizada -y así debe ser percibido- y la razón por la cuál sus técnicas han probado ser exitosas recaen en la necesidad del ser humano de ser reconocido como individuo que pertenece a una comunidad.

¿Cómo se hace?

 Ya conoce porque el Marketing uno a uno funciona. Ahora es el momento de que usted vea los beneficios de aplicar sus técnicas.

Los cuatro puntos o ideas subyacentes son:

Identificar al posible cliente.

Usted deberá obtener suficiente información que le permita predecir el comportamiento de cada visitante. Deberá crear y mantener bases de datos que incluyan las transacciones realizadas, preferencias, consultas que le haya hecho el cliente y, por supuesto, actualizar continuamente esa información cada vez que exista contacto con él.

Diferenciarle del resto.

Los recursos deben ser aplicados donde mayor efecto causen. Para eso, usted deberá aislar a sus clientes para determinar cuales le están permitiendo el mejor retorno sobre la inversión y por supuesto, diferenciar sus necesidades.

Diferenciar a sus visitantes le permitirá inclusive abandonar líneas que sean rentables.

Interactuar con él.

Tiene que ver al Marketing uno a uno como un proceso que se desarrolla de manera continua de forma tal que le permita desarrollar una cultura de aprendizaje que pueda retroalimentar su sistema.

Personalizar los productos o servicios de acuerdo con sus necesidades

El objetivo final del Marketing uno a uno es la adaptación del comportamiento de su organización a las necesidades de sus clientes.

Usted ofrecerá experiencias únicas y construirá una relación duradera con sus visitantes. Estas acciones deberán ser objeto de monitoreo y establecimiento de parámetros medibles de éxito.

Pero, por favor, no piense en un simple criterio de segmentación. El verdadero Marketing uno a uno va más allá de eso, al reconocer la necesidad de establecer relaciones con los individuos.

Ellos son personas que merecen su lealtad, escuchándolos y satisfaciendo sus necesidades. Si usted les pide lealtad con su marca, usted también deberá ser leal con ellos.

Su desafío será entonces determinar sus propias necesidades y encontrar la tecnología adecuada para satisfacerlas.

¿Existe esa tecnología ? Sí y de eso hablaremos en otra entrega.