En anteriores oportunidades, me referí al tema de iniciar un negocio en internet. Sé que es una decisión trascendental en la vida de las personas, porque en su momento también lo fue para mí. Y vuelvo a retomarlo porque me preocupa que hay gente que se lo toma muy a la ligera, que asume lo que no es y, a la vuelta de la esquina, lo paga caro.

Es cierto que internet es una herramienta muy poderosa y también un escenario en el que muchos (ahí me incluyo) tuvieron éxito y alcanzaron la prosperidad económica, además del reconocimiento del mercado. Sin embargo, es cierto también que internet es un dolor de cabeza para los que no lo conocen o para los que no lo utilizan adecuadamente.

Una gran ventaja de internet es que lo puede usar cualquier persona, en cualquier lugar del mundo, sin distinción de color de la piel, raza, religión, ingreso económico o nivel educativo. Aquí, parodiando el tema del Gran Combo de Puerto Rico, sí hay cama para tanta gente. Eso, en todo caso, no significa que cualquiera puede tener éxito en un negocio virtual.

Mercadeo Global - Álvaro Mendoza

Si no inviertes, a lo máximo que puedes aspirar en internet es a las redes sociales.

¿Por qué? Internet es gratuito para el que desea hacer presencia en las redes sociales, para el que quiere montar un blog informal, para el que desea tener perfiles que le den visibilidad y le permitan ser conocido en ese ámbito. Sin embargo, para hacer negocios es necesario invertir: tiempo, capital, recursos. Porque nadie se volvió millonario solo por tener un perfil de Facebook.

Con frecuencia escuchamos noticias de jóvenes que en poco tiempo se volvieron multimillonarios gracias a lo que algunos llaman ‘la magia de internet’. Con más frecuencia aun me habrás escuchado que no existe tal ‘magia’ y que lo que hay detrás de esos emprendimientos es trabajo. Que necesitaron menos tiempo y dinero para alcanzar el objetivo, es otro tema.

Lo que se puede decir de esas personas es que contaron con una dosis de suerte que le dio el impulso definitivo a una buena idea que fue bien llevada cabo, bien trabajada. Es claro que ofrecieron un buen producto, que lo pusieron a consideración del nicho que lo requería y que emplearon las estrategias de marketing adecuadas para venderlo.

Eso, amigo mío, no es magia: es trabajo, puro trabajo. Si lo que deseas es tener ingresos consistentes y duraderos, un negocio que puedas escalar en el tiempo, lo primero que debes hacer es conocer internet. Sí, sus características, sus posibilidades, sus costos, sus exigencias, sus modalidades. Es un universo de oportunidades, pero también una fiera que te puede devorar.

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Educación, preparación, inversión y trabajo, los cuatro pilares del éxito en internet.

En las notas Qué debes invertir para empezar tu negocio y Familiarízate con los negocios en internet para que la red no te devore ya ofrecí algunas pistas importantes, ideas y conceptos que debes tener muy claras para evitar una dolorosa equivocación. Ahora, en todo caso, te refuerzo algunos de ellos, para que no quede espacio para la duda.

Lo primero es que si lo que deseas tener en internet es un emprendimiento de carácter comercial, sí o sí, obligatoriamente (y perdón por la reiteración), necesitas invertir. Invertir tiempo, invertir dinero, invertir recursos. Debes capacitarte, debes investigar el mercado, debes probar tus productos. Debes analizar a la competencia, debes contratar personal.

El éxito no es para cualquiera

El problema radica en que hay muchos que predican que en internet basta enviar unos cientos de correos electrónicos, o poner en venta un producto con un precio más barato que el de la competencia o regalar un recurso (un libro, por ejemplo) para obtener clientes y hacer rico de la noche a la mañana. Eso, claramente, ¡Es una gran mentira!

Internet tiene la ventaja de que se ha desarrollado de modo que lo pueda usar cualquiera. El niño desde su intuición, el abuelo desde su recelo por la tecnología. Pero, repito, si se trata de hacer negocios, el embudo se estrecha: ya no cualquiera puede alcanzar el éxito. Este estado se reserva para los que se educan, se preparan, invierten y trabajan.

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El éxito en los negocios en internet no es magia: es trabajo y más trabajo.

Lo reitero, para que quede claro: educarse, prepararse, invertir y trabajar. Esas son las cuatro patas de la mesa en la que se sirven el éxito y la prosperidad en los negocios y en la vida. Como ves, no es magia; no es un golpe de suerte (como en el casino), no es una fórmula perfecta que dé frutos de un día para otro. Es educación, preparación, inversión y trabajo.

La buena noticia es que los costos que se deben cubrir para montar un negocio en internet son realmente bajos. ¡Nada que ver con lo que costaba hace dos décadas, cuando yo me inicié en esto! Es posible obtener un buen hospedaje web por 10 dólares mensuales, que garantiza una presencia que en esas primeras etapas es suficiente.

Eso sí, hay que saber que a medida que el negocio crece, que los clientes llegan, es necesario invertir más: ampliar la plataforma, adquirir mejores herramientas (más seguras), contratar personal para que nos dé una mano en las tareas operativas, un servidor dedicado, equipos adecuados para realizar los webinarios, en fin.

Mercadeo Global - Álvaro Mendoza

Internet es una herramienta increíble, al alcance de cualquiera, inclusive de los niños.

Un negocio exitoso en internet arranca con el conocimiento del producto, del mercado y del ambiente (la red). A esa teoría, luego, hay que sumarle acción: debes aplicar lo que aprendiste. Y date la oportunidad de equivocarte, que no es más que conocimiento disfrazado. Y busca aprender de las experiencias ajenas, de los que ya tuvieron éxito.

Un consejo final: huye de todo aquello que suene a “Hágase rico rápido en internet”. Eso, sencillamente, no existe. ¿Y hay que invertir? Sí, hay que invertir. Cuánto, depende de lo que quieras hacer, de cómo quieras empezar. Pero, por favor, no olvides la premisa de la mesa: el éxito en los negocios en internet es producto de educación, preparación, inversión y trabajo.