La velocidad a la que avanza la tecnología es tan frenética, que a veces lo que ayer fue una novedad hoy ya está obsoleto. Pasa con la moda, pasa con las costumbres, pasa con los hábitos, pasa sobre todo con la tecnología. Sin embargo, como toda regla tiene su excepción.
En efecto, los webinarios, que son un genial invento de finales del siglo pasado, viven su época dorada, al punto que en la industria 2017 fue denominado ‘El año de los webinarios’. Hay que convenir, sin embargo, que los webinarios de hoy son bien distintos a aquellos que revolucionaron la forma de hacer capacitaciones empresariales (el uso que dio origen a esta herramienta) en la segunda mitad de los lejanos años 90.
Hoy, nos ofrecen una imagen reencauchada, como si hubieran pasado por el quirófano de un cirujano plástico: los webinarios están jóvenes, están radiantes, están fortalecidos, están enriquecidos. Eso, a pesar de que en torno de esta herramienta hay una curiosa paradoja.
¿Cuál? Se usan hace más de veinte años, la mayoría de las personas del medio del marketing por internet reconoce haberlas usado o, cuando menos, haber asistido a una actividad desarrollada con esta tecnología. Inclusive, muchos otros están familiarizados con los webinarios, principalmente en el área de la capacitación empresarial.
Puntualmente, el noventa por ciento de las personas relacionadas con negocios por internet respondieron sí cuando se les consultó si habían asistido a un webinario. Sin embargo, muchos de ellos, increíblemente, no saben usar esta herramienta. Se antoja una contradicción, ¿cierto?
Superando obstáculos
Peor aún, si la usaron antes, lo único que consiguieron fue provocarse un gran dolor de cabeza, echar a perder una oportunidad de negocio que, quizás, los hubiera llevado a otro nivel. Con todo y eso, en el mercado estadounidense, los webinarios son, desde hace mucho tiempo, la mano derecha de los empresarios exitosos.
Es más: los que todavía no alcanzaron la cima están frenados, entre otras razones, porque no usan o no aprovechan las ventajas que les brinda esta herramienta. Son ellos, precisamente, los que jalaron el desarrollo de esta tecnología, que sigue fortaleciéndose, enriqueciéndose, evolucionando.
En Latinoamérica, lamentablemente, los webinarios son todavía algo exótico para muchos. Peor aún, muchos aún sienten temor de usar esta tecnología, porque no están convencidos de sus beneficios, porque ignoran sus alcances, porque no se sienten cómodos e identificados con las alternativas que les ofrece el mercado.
Por eso, precisamente por eso, sus negocios todavía no despegan. El 2017, sin embargo, es el año para dejar atrás esas limitaciones, esos temores, esos inconvenientes. Los líderes de la industria de los negocios por internet lo denominaron como El año de los webinarios.
Este es el penúltimo impulso que necesita esta herramienta para consolidarse como la más efectiva para llevarlos a ti y a tu negocio a donde deseas. Es un acuerdo para facilitar su uso, para promover sus ventajas, para fortalecer sus características. Es, en otras palabras, una oportunidad que no puedes desaprovechar, pues no volverá.
Es clara muestra, también, de que los webinarios son la herramienta preferida de los emprendedores en internet en el mercado estadounidense, de la confianza que los exitosos tienen en ella, de las increíbles posibilidades que les ha brindado, de los evidentes avances que esta tecnología ha experimentado en los últimos años.
Tras dos décadas de batallar en el mercado para consolidarse, los webinarios son la estrella que más brilla en el firmamento de los negocios en internet. Surgieron en una época que podemos definir como la prehistoria de internet: la conexión era vía telefónica (supeditada al ruido, sometida a eventuales y repetidos cortes, terriblemente costosa).
Fantástica evolución
Solo era posible transmitir voz y el resto era persignarse y encomendarse al Altísimo: ¡Aun así, los webinarios sobrevivieron, crecieron, se desarrollaron y ahora se reproducen! La permanente evolución de la tecnología de transmisión ha permitido el rápido avance de los webinarios. Y, sin duda, son el mejor aliado de tu negocio.
La irrupción de la banda ancha, que cada vez es más ancha y más confiable, sin que los costos la conviertan en inalcanzables para la mayoría, permitió agregar opciones como el video. Hoy, no me atrevería a decir quién jalona a quién, si la tecnología a los webinarios o los webinarios a la tecnología.
Aunque en algunos países de Latinoamérica el desarrollo de la tecnología de transmisión de banda ancha sigue lejos de los estándares ideales, y todavía hay regiones en las que la conexión es un lujo, lo cierto es que en las grandes ciudades, donde se concentra la mayor cantidad de personas, lucha por ponerse al día.
Esos avances se han reflejado en una cifra que hace unos pocos años era inimaginable: la penetración de internet en Latinoamérica y el Caribe creció ¡el 934 por ciento!, en los últimos diez años. En Estados Unidos, donde la tecnología crece todos los días, en ese mismo período la penetración del internet solo se incrementó en un 140 por ciento.
Es justo decir, sin embargo, que los límites de crecimiento en Estados Unidos son cada vez menores, debido a que la tecnología tiene una gran cobertura, pero también sabemos que las posibilidades, y sobre todo los recursos, son infinitamente superiores a los de Latinoamérica. Esa es una realidad que no podemos desconocer.
La brecha se ha achicado, al punto que en nuestros países hay más de 250 millones de personas conectadas a internet, solo 60 millones menos que en EE. UU. ¿Entiendes de qué te hablo? De que existe un enorme potencial por desarrollar, de que las posibilidades para los emprendedores y empresarios latinos son, hoy por hoy, ilimitadas.
Se trata de un mercado atractivo, ávido de herramientas como los webinarios, que además está interesado y, lo más importante, que tiene conocimiento, que está educado en el tema. Ese es un gran avance respecto del pasado reciente. Lo único que lo detiene, el único obstáculo que se presenta en el camino, es el miedo.
Lo cierto, es que cualquier miedo que aún puedas sentir es infundado. ¿Por qué? Porque las ventajas y los beneficios de los webinarios son increíbles. Te menciono una, quizás la más destacada: con los webinarios, el porcentaje de conversión de tu negocio crece como espuma, con rapidez y efectividad.
Dado que permiten una interacción real en vivo y en directo (dos elementos que en un comienzo eran una utopía: interacción real y en vivo), los webinarios permiten hacer presentaciones combinadas de audio y video, de manera remota y con audiencia en cualquier lugar del planeta.
Eso, en plata blanca, es una ventaja competitiva que ninguna otra herramienta te brinda y que, además, te destaca sobre tú competencia y sobre quienes no los utilicen. La velocidad a la que avanza la tecnología es tan frenética, que a veces lo que ayer fue una novedad hoy ya está obsoleto.
Pasa con la moda, pasa con las costumbres, pasa con los hábitos, pasa sobre todo con la tecnología. Sin embargo, como toda regla tiene su excepción, los webinarios, que son un genial invento de finales del siglo pasado, viven su época dorada. ¿Estás listo para disfrutarla? No dejes pasar la oportunidad: 2017 es el año de los webinarios.
desde hace mucho tiempo los sigo y la información que me envían ha sido de mucha ayuda gracias
Buenas tardes no he podido descargar el libro Webinar si me pueden ayudar les agradesco
Lo puedes obtener desde: http://libro.webinarclic.com
Desde hace un tiempo estoy bastante interesada en entender y conocer de los webinarrios, desafortunadamente aunque me he inscrito en varios conferencias por la web me ha sido imposible participar en estas, pero de todas formas estoy pendiente de toda la información que me envían pero aun no estoy muy clara
Martha Cristina, te recomiendo mi libro (gratuito) «Webinars, a un clic del Éxito». Lo puedes descargar desde: http://libro.webinarclic.com
Muy interesante el tema webinars
Me parece una gran oportunidad, pero quien jamas uso esta herramienta actual para promocionar productos en venta, debe ser guiado paso a paso, para manejarlo .